Aunque cada Cristiano tiene una relacion personal con Dios, esa relacion no es individual o privada.
Fuimos hechos para la relacion comunitaria y la relacion con Dios. La iglesia local no es simplemente un lugar al que asistimos, sino un pueblo al que pertenecemos.
La Biblia nos llama el cuerpo de Cristo (1 Corintios 12:12-31) con la expectativa de que contribuyamos al cuerpo para la gloria de Dios y el bien de su pueblo.